Durante varios años, en una época en la que en Los Romeros y sus alrededores había sólo un par de casas habitadas durante el invierno, veíamos bajarse de la micro a un misterioso personaje de pelo largo frente a la Playa Las Bahamas, el que después subía por la escalera que da a esa playa, o por San Fabían. Todos nos preguntábamos por su identidad, su apariencia nos impresionaba. Se trataba de Juan Luis Martínez Holger, poeta vanguardista y artista plástico chileno, quien vivió largos años en Concón, frente al mar en una casa de la calle Vergara.
Juan Luis Martínez nació en Valparaíso el 7 de Julio de 1942, hijo de Luis Martínez Villablanca, —quien fuera Gerente General de Compañía Sudamericana de Vapores—, e Isabel Holger Dabadie.
Tuvo tres hermanas, una de ellas María Gloria Martínez, murió a los 12 años de manera fulminante, lo que produjo en el poeta un cambio radical en su manera de ser y también originó su tartamudez, porque María Gloria había sido la gran compañera de su niñez temprana.
Martinéz es considerado como uno de los poetas más lúcidos de su generación por su original creación literaria, su erudición e ingenio.
Su vida transcurrió fundamentalmente, entre las ciudades de Valparaíso, Viña del Mar, Concón y Villa Alemana, en las que realizó su obra, la que parte de un cuestionamiento a la creación literaria y artística tradicional.
Durante su juventud mantiene una estrecha relación con poetas y escritores tales como Nicanor Parra, José Donoso, Martín Cerda, Enrique Lihn, Pedro Lastra, Raúl Zurita, Sergio Badilla Castillo, Eduardo Parra Pizarro, Gustavo "Grillo" Mujica , Juan Cameron y Freddy Flores Knistoff. Cultiva una estrecha amistad con Raúl Zurita. quien se casó con su hermana menor Miriam Martínez.
Juan Luis Martínez abandonó el colegio recién iniciados sus estudios secundarios, y entre los quince y veinte años de edad vive intensamente la vida bohemia de Valparaíso.
El poeta era considerado un muchacho rebelde, tanto por su familia como por los que lo conocieron. Por esa época tiene varios accidentes en motocicleta, uno de ellos muy grave lo deja postrado en cama con pleuresía por un mes, lapso de tiempo en el que descubrie la literatura y la poesía por intermedio de su madre. Tenía 17 años, y este episodio marca su iniciación al arte.
Nunca más regresará a ninguna aula estudiantil, pero por las influencias culturales que lo rodean, comenzará una larga etapa de lecturas y aprendizaje autodidacta.
El traslado de su familia de Valparaíso a Viña del Mar, lo inquieta y le desagrada, debido al ambiente burgués que por esos años dominaba en el balneario; por eso seguirá manteniendo una relación profunda y sentimental con su ciudad de origen y con la bohemia porteña, esa que se reunía en los bares Roland, Yako, Inglés, Alemán, Pajarito, e incluso en el agonizante y clásico Siete Espejos de la calle Clave.
Se casó con Eliana Rodríguez, quien lo acompañará por el resto de su corta vida. Al año siguiente de su matrimonio nace su primera hija a quien llama Alita en honor a un cuento de Paul Eluard; su segunda hija María Luisa tiene un parecido físico sin igual al Poeta.
Vive el golpe militar en forma muy intensa y dolorosa, durante éste período es incluso detenido por unas horas.
La muerte de su padre Luis Martínez Villablanca de un infarto fulminante en El Belloto (Quilpué), deja devastado emocionalmente al poeta. Ese mismo año edita su primer gran obra “ La Nueva Novela” desechada años antes por la editorial Universitaria de Valparaíso, pero que con los años se ha transformado en uno de los libros fundacionales de la poesía chilena contemporánea.
Su otra publicación: “La Poesía Chilena”, que es un libro-objeto, contenía la copia de los certificados de defunción de los "cuatro grandes" de la poesía chilena: Mistral, Huidobro, de Rocka y Neruda.
Recibe una beca de la Fundación Andes y en 1992 es invitado por el Gobierno de Francia al evento “Les Belles Étrangères” en Paris, junto a otros diez destacados escritores Chilenos, como Nicanor Parra, Diamela Eltit, Gonzalo Rojas, Jorge Edwards, etcétera.
Enferma gravemente después de una seria disputa con militares al defender a una mujer en la calle Valparaíso de Viña del Mar, enfermedad que lo tuvo postrado por 10 años hasta su temprana muerte de un infarto fulminante a los 49 años, en 1993.
Escrito por Guillermo Cauchemardesque
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